ATEMPORALIDAD
En su raíz etimológica ATEMPORA alude a lo sin tiempo, a lo incólume frente al paso del tiempo haciendo referencia a la atemporalidad que la buena arquitectura debe contener.
Y si esto lo relacionamos con la actividad empresarial que es un camino en sociedad de emprender, desarrollar, consolidar para trascender y dejar un legado a las futuras generaciones, se produce un punto de encuentro entre el edificio y quienes lo habitan.